Caía viernes, pero desde el lunes de la misma semana se veían y/o leían las reacciones de la gente: padres/abuelos que colapsaban de miedo y hasta preparaban su mochila “por si las huevas”, jóvenes que vivían cada día como si realmente fueran los últimos días de sus vidas, niños que nada entendían, colegios que cancelaban clases, bloguer@s que escribían posts dedicados al fin del mundo (qué vergüenza), hueveros que se lo tomaron en serio e hicieron esto:
domingo, 23 de diciembre de 2012
Un día más
Caía viernes, pero desde el lunes de la misma semana se veían y/o leían las reacciones de la gente: padres/abuelos que colapsaban de miedo y hasta preparaban su mochila “por si las huevas”, jóvenes que vivían cada día como si realmente fueran los últimos días de sus vidas, niños que nada entendían, colegios que cancelaban clases, bloguer@s que escribían posts dedicados al fin del mundo (qué vergüenza), hueveros que se lo tomaron en serio e hicieron esto:
martes, 18 de diciembre de 2012
Desagradable sorpresa
viernes, 7 de diciembre de 2012
Carta al futuro
- La herramienta de gileo de muchos -en ese entonces- adolescentes desapareció, pues, en la segunda mitad del año, se anunció el cierre de MSN Messenger. Minutos de silencio, por favor.
- El extraño fenómeno del KPop llegó al Perú, logrando su máxima expresión al observar a jovencillas acampando afuera del Jockey Club (con el propósito del concierto del grupo Big Bang) no uno ni dos, sino siete días antes del concierto.
- Un paracaidista austríaco saltó desde un globo hacia la estratófera desde una altura de 38 kilómetros sobre la tierra, en un intento por romper la barrera de sonido.
- A mediados de diciembre, un joven de 20 años llamado Adam Lanza entró a un colegio en Connecticut-EE.UU. portando 4 tipos de armas y asesinó a 20 niños (de las edades entre 5 y 10 años) y a 6 docentes. Días después del tiroteo, Gringolandia no pronunció ninguna nueva ley sobre la venta y uso de armas en el país.
domingo, 18 de noviembre de 2012
El amor
Comenzaron a hablar seguido hasta conocerse. Luego comenzaron a verse para comprenderse.
lunes, 22 de octubre de 2012
Sola
El otro ente les pregunta qué tal estuvo su día y ellas se mojan, les dice “hola” y piensan que quiere sexo desenfrenado, les pregunta qué nombres le gustan e imaginan que lo hace para saber cómo se llamarán sus futuros (e imaginarios) hijos.
Sin embargo, estas individuas caen dentro de un tipo de personas que cada día sobreviven en este mundo inmundo: se ilusionan rápido, pero se enamoran lento.
Por este motivo, se demoran en encontrar pareja (a veces hasta llegan a estar solas por años). Hasta que, un día, aparece un príncipe azul montando un hermoso caballo blanco y despertando sus hormonas revueltas.
Las mariposas comienzan de nuevo a alterar el estómago y el cuerpo comienza a temblar como si fueran a tener un ataque epiléptico.
Se ven, se hablan, se abrazan, se sonríen, se tocan, se besan, pero hay un problema: él ya está en las nubes, pero ellas se han quedado con los pies bien puestos sobre la tierra.
Y la noche termina de la peor manera: él regresa a su casa con el ego destrozado y ellas… Bueno, ellas regresan a las suyas solas, como siempre lo han estado.
miércoles, 17 de octubre de 2012
25 años
lunes, 15 de octubre de 2012
Broche de oro
sábado, 6 de octubre de 2012
Recuerdos
entré a recoger la plata. Hasta ahora pienso qué hubiera pasado si salía y no la encontraba.
Arianna me trajo papel higiénico y me abrazó, sin decir nada.
miércoles, 26 de septiembre de 2012
Sueños
lunes, 17 de septiembre de 2012
''Tenemos que hablar''
jueves, 6 de septiembre de 2012
Mucho gusto
lunes, 27 de agosto de 2012
Los diez nuevos mandamientos
martes, 21 de agosto de 2012
Tac tac tac
miércoles, 15 de agosto de 2012
Inocencia interrumpida
jueves, 2 de agosto de 2012
A veces
martes, 24 de julio de 2012
Mamita Leti
sábado, 21 de julio de 2012
Andrés
11:00 am. Despiertas, ves la hora y te puteas fugazmente por dormir hasta “tan tarde”, pero, un segundo después, dices “qué chucha. Es sábado y qué rico es dormir”. Volteas, te vuelves a tapar con la sábana y regresas al ronque.
12:30 pm. Vuelves a abrir los ojos y a ver la hora y decides que es momento de levantarte de la cama e interactuar con otros entes humanos. Al mismo tiempo, sin embargo, no quieres que nada ni nadie te joda en todo el día. Hoy te has levantado con el pie izquierdo, al parecer.
01:00 pm. El almuerzo está listo. Antes de embutirte la comida, vas al baño a lavarte las manos y, de paso, mirarte en el espejo. Te observas de pies a cabeza (y viceversa) y te preguntas por qué, por el amor de Dios, pareces un tamal envuelto. Encuentras la respuesta: ayer, en la salida con tus amigas regias, te dio un ataque de ansiedad y pediste entrada, plato de fondo y postre, encima con repetición. Analizas los hechos (incluido lo que ves en el espejo) y decides que, a partir de este momento, harás dieta estricta y ejercicios para verte igual de regia (o más) que tus amigas. Cinco minutos después, te encuentras sirviéndote más arroz y puré, poniéndole kétchup al apanado y repitiendo el procedimiento.
04:00 pm. Más de dos horas después del almuerzo y sigues echada en tu cama como morsa, sin hacer nada. Quieres salir, pero sólo si alguien te baña, te cambia, te lleva y te regresa a tu humilde hogar y si alguien te pasa la voz para hacer algo. Como nadie lo hace, te vas a tragar y luego a roncar.
06:00 pm. Tres personas te dicen para hacer algo más tarde y tú rechazas a las tres personas porque no te sientes bien. Mentira. Te sientes bien; simplemente eres una floja de mierda.
07:00 pm. Ves que la gente ya está viendo en dónde caer más tarde y te preguntas por qué nadie te quiere y/o por qué no tienes amigos de verdad. Lloras. Media hora después, Pepito te habla y te pregunta si quieres ir al cine. Le dices que no, porque tienes que sacar a pasear a tu unicornio. Quieres salir, pero no con Pepito. Como nadie más te habla, lloras de nuevo.
09:00 pm. Ya que no saldrás hoy, te instalas en tu cama con la pijama más holgada y menos sexy que existe, con un kilo de pop corn en la mano y con las películas que cagan tu existencia en la otra (que suelen ser sobre tías solteronas o sobre historias de amor que sólo ocurren en las películas). Después de llorar peor que Magdalena y de tragar como si no existiera el mañana, decides irte a dormir, no sin antes comer ese último pedazo de la torta de chocolate.
Ya en tu cama, agradeces que el día esté a punto de terminar. Pero no cantes victoria. Mañana empezará todo de nuevo.
Más o menos así es como transcurre el primer día de la llegada del tan odiado (y, a veces, amado) Andrés.